Los materiales peligrosos, a menudo denominados HAZMAT, abarcan una gama de sustancias que incluyen productos químicos, gases, explosivos, baterías, imanes y fertilizantes, que pueden estar en forma sólida, líquida o gaseosa. Estos materiales se clasifican estrictamente en nueve clases, ya que representan un riesgo potencial para la salud humana, la propiedad o el medio ambiente debido a sus propiedades químicas o físicas.
La clasificación es útil para comunicar los peligros a lo largo de la cadena de transporte y garantizar que se sigan los procedimientos de manipulación y envío adecuados.
Las clasificaciones incluyen:
Clase 1: Explosivos
Clase 2: gases
Clase 3: Líquidos inflamables
Clase 4: Sólidos inflamables
Sustancias susceptibles de combustión espontánea
Sustancias que emiten gases inflamables en contacto con el agua
Clase 5: Oxidantes/peróxidos orgánicos
Clase 6: Sustancias tóxicas e infecciosas
Clase 7: material radiactivo
Clase 8: Corrosivos
Clase 9: Materiales peligrosos diversos
Sustancias peligrosas misceláneas como baterías de litio
Por lo general, los proveedores desempeñan un papel crucial en la identificación de si un producto está incluido en HAZMAT, los procedimientos de envío adecuados relevantes, y deben proporcionar documentación completa y precisa para estos materiales.