Los cargos por transporte terrestre (IHC, por sus siglas en inglés) se refieren a las tarifas impuestas sobre el transporte de mercancías por tierra hacia o desde los puertos, que generalmente implican la transferencia a una instalación terrestre que maneja contenedores.
Estos cargos abarcan los costos asociados con el uso de diferentes modos de transporte, como carretera y ferrocarril. Los cargos se aplican directamente a los remitentes y pueden fluctuar en función de factores como la naturaleza y el peso de los bienes que se transportan.